Lidia Pérez de Vásquez, hace más de un mes que se encuentra internada en una clínica de la ciudad capital por un grave problema de salud.
Durante estos días necesita que le realicen transfusión de sangre; la sangre necesaria para prolongar su vida. Por eso sus familiares quieren agradecer a más de una veintena de personas (principalmente jóvenes), por el buen corazón que tuvieron para viajar y ser donantes para salvar su vida. Mientras tanto otros familiares siguen buscando por distintos lugares a un potencial donante.
Por su parte, al ser consultadas algunas personas las razones que le hicieron convertirse en un dador altruista de sangre, sin siquiera haber tenido algún contacto con anterioridad con los familiares, expresaron en general que: "Lo que ha motivado a donar sangre altruistamente, es el saber que estamos ayudando a seguir viviendo, dando paz, alegría y esperanza a alguien que lo necesita. Es dar amor a alguien que no conozco".
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